Stack

Justo cuando pensé que había visto todo tipo de juegos de puzzle, llega Stack y me deja pegado a la pantalla intentando alcanzar el cielo con mis habilidades de apilamiento. La premisa es sencilla pero adictiva: plataformas que se deslizan a velocidad vertiginosa y tú debes alinearlas a la perfección para construir la torre más alta posible. Aunque suene fácil, la realidad es que cada pequeño error hace la base más y más pequeña, aumentando el desafío.

Los gráficos son un delirio de colores y formas que me mantuvieron entretenido por horas, concentrado en no cometer fallos y maximizando cada bloque. No soy el único que piensa que la satisfacción de conseguir una alineación perfecta es algo casi terapéutico. Entre comentarios de otros jugadores, he notado que muchos alcanzan rápidamente cientos de puntos, lo que demuestra que no solo soy yo quien encuentra este juego astutamente simple y entretenido. A pesar de la simplicidad, el juego tiene su toque complejo, lo que te obliga a ejercitar tanto tu tiempo de reacción como tu paciencia.

Definitivamente, Stack es una joya para aquellos que gustan de los juegos de habilidad y precisión. No te sorprenda si te encuentras compitiendo contra ti mismo, intentando superar tu propia puntuación. Y, oye, si crees que es fácil, te reto a que lo intentes; quizás te sorprendas con lo desafiante que puede llegar a ser.