Neon Ball

Recientemente, tuve la oportunidad de jugar Neon Ball, un juego que combina habilidad y estrategia al guiar una bola plateada en busca de portales misteriosos. Las plataformas rotatorias se han convertido en mis nuevas amigas (o enemigas, dependiendo de mi habilidad en ese momento) y el desafío de no hacer explotar la bola con un movimiento erróneo supuso una emocionante tensión.

Me encontré completamente inmerso en el acto de equilibrar la pelota, mientras buscaba atrapar todas las estrellas de cada nivel. Hay algo encantador en este juego; es como intentar llevar una vela encendida por un camino ventoso sin que se apague. Muchos jugadores han expresado su satisfacción al terminar rápidamente, lo que sugiere que mientras Neon Ball puede ser fácil de comprender, siempre hay espacio para mejorar y perfeccionar tu técnica.

Y, hablando de técnica, me vi forzado a encontrar ese equilibrio perfecto entre velocidad y cautela; algo que otros jugadores también han destacado. Si bien muchos valoran su facilidad para ganar en el juego, otros han comentado que les gustaría tener más niveles para un mayor reto. Sí, hay anuncios, pero eso es casi una constante hoy en día.

En definitiva, Neon Ball me ha enganchado y me alegra ver que no fui el único al que le dejó esa sensación de 'flotar', como si fuera el Neo de los juegos de habilidad. Por cierto, ¿por qué no hacen puzzles para piratas? Porque pierden las piezas.