Adventure Craft

Después de pasar un tiempo en Adventure Craft, entiendo a aquellos que encuentran un gusto especial al unir bloques y recoger recursos en una aventura pixelada. Sí, la premisa de ayudar al minero a hallar los tesoros escondidos bajo tierra resulta atractiva y nos recuerda la fiebre del oro digital al estilo Minecraft.

A medida que intentaba conectar cadenas más largas para hacer desaparecer los bloques, la satisfacción de cumplir los objetivos antes de que el tiempo se escapase añadía un toque de tensión que mantenía mi interés. Sin embargo, la repetición y el ritmo a veces predecible me hacían anhelar una mayor variedad y retos que renovaran la experiencia de juego.

No cabe duda de que algunos jugadores terminan encariñándose con los pequeños logros y progresos que ofrece Adventure Craft, pero a medida que avanzaba, no podía evitar notar que le faltaba ese factor sorpresa que transforma un buen juego en algo genial. Aun así, para alguien en busca de una experiencia casual que involucre puzles y minería, podría valer la pena echarle un vistazo.